Si en España tenemos la Charrúa (especializado en cocina uruguaya), La Gran Tasca (su cocido es muy famoso) o el Asador Donostiarra (Felipe VI comió allí), en Estados Unidos tienen también establecimientos capaces de juntar a los rostros más populares de sus fronteras. Uno es Lure Fishbar, situado en la ciudad de Nueva York y conocido por haber dado de comer a 'celebrities' de la talla de Heidi Klum, Chris Rock o Ken Burns. Sin embargo, circulan ciertos rumores acerca de su cierre, y es que ha saltado la noticia de que su contrato de arrendamiento acaba en 2026, por lo que su futuro es incierto. De hecho, parece ser que Prada está interesado en comprar el local. Aun así, son solo rumores y no hay nada oficial. Lo que sí es cierto es que varios famosos han hablado sobre el supuesto cierre de Lure Fishbar, y algunos han mostrado su tristeza ante este presunto acontecimiento. Cindy Crawford, supermodelo estadounidense y dueña de Casamigos Jalapeño, mostró a The Post su pena si el cierre es oficial. "Sería muy triste ver cómo cierra un lugar que reunió a tantas personas de la moda y otras industrias después de tantos años", señala la americana. Además, admitió que Lure Fishbar es un sitio al que suele ir con su hija, Kaia Gerber. Heidi Klum, modelo alemana y actriz, también ha mostrado su tristeza ante esta noticia, al igual que el cineasta Ken Burns, quien dijo a The Post que "es nuestro submarino amarillo. La comida es fantástica. Pedimos el salmón glaseado con miso y los camarones tempura. Se siente como un hogar fuera de casa". Lure Fishbar es un restaurante situado en el número 142 de la calle Mercer Street, en Nueva York. Su dueño es John McDonald (también dueño de otros locales) y el chef es Preston Clark. La carta de Lure Fishbar destaca sobre todo por el marisco y el sushi, algo que se puede comprobar echando un vistazo a sus redes sociales. Además de la sede de la ciudad de los rascacielos, cuentan con otro local en Chicago. Apúntate a nuestra newsletter y recibe en tu correo las mejores novedades para disfrutar al máximo del placer de comer.