Un espectáculo que mezcla comedia y beatboxing (sonido vocal), muy participativo y con mucha improvisación y que también han paseado por los platós de programas de televisión como La Resistencia o Late Motiv. “Un show que se renueva a diario, porque le ponemos mucho mimo al público específico que viene a disfrutar de nuestro espectáculo cada noche. Por lo demás, será una comedia muy ácida y beatbox de otro planeta”, aseguran los cómicos. Jaime Caravaca aporta su rápido ingenio en el monólogo: “Soy murciano, visto ropa de tía y me pinto las uñas de negro, este es el chiste inicial”. Mientras que Grison Beatbox es un artífice de la creación de compases y sonidos musicales utilizando labios, boca e incluso pliegues vocales. De la mezcla de ambos surge una de las colaboraciones cómicas más exitosas de los últimos años. “En los espacios abiertos, sacamos todo nuestro rock and roll y ofrecemos la misma experiencia que brindamos en un teatro, pero con actitud de festival”, afirman. Sobre el escenario, Caravaca y Grison son dos genios de la improvisación y el humor crítico y sarcástico. Entre ellos se hace ver una conexión escénica que les ha hecho famosos, con doblajes en directo, canciones imposibles, loopstation…