Creado en 2006 por Enrike Solinís, Euskal Barrokensemble ha conseguido de manera personal hacerse un hueco en el panorama internacional de música antigua. Las características principales del grupo, aquellas que lo hacen reconocible, son su frescura y cercanía en la interpretación, que ofrecen un espacio importante a la improvisación y recreación de la música de muy diferentes épocas, desde un punto de vista claramente personal. Gracias a esto Euskal Barrokensemble se ha ganado la crítica internacional, así como a un gran y heterodoxo público, que hace que su interpretación en directo tenga vida y sentido.