La Asociación Alfredo Sada (Colectivo de artistas plásticos) presenta su exposición “Belleza y destrucción” en el Pabellón de Mixtos de la Ciudadela (Planta Primera) del 28 de enero al 7 de marzo. Cada año, la asociación prepara una exposición colectiva con un tema concreto y una puesta en común. En esta ocasión el tema elegido es BELLEZA-DESTRUCCIÓN-BELLEZA. la representación de las consecuencias de la destrucción, tanto natural como intencionada, se convierte en tema de la obra de numerosos artistas. Desde Goya hasta nuestros días la destrucción causada por las guerras y sus desastres es un tema recurrente en las representaciones artísticas. La asociación Alfredo Sada en esta exposición, aporta la visión personal de un grupo de artistas sobre los elementos estéticos que subyacen en procesos destructivos que se producen a nuestro alrededor. La Asociación ALFREDO SADA, está formada en su mayor parte por personas que han finalizado los cursos monográficos de Dibujo Artístico y Pintura de la Escuela Municipal de Arte Catalina de Oscáriz. El objetivo es tener un taller de trabajo y encuentro entre quienes, una vez terminados sus estudios, quieren desarrollar su trabajo y profundizar en sus conocimientos artísticos. Actualmente son 35 personas las que en Urederra 18 realizan sus trabajos, organizan talleres en el propio espacio con maestros en distintas técnicas: pintura, acuarela, grabado…, colaboran en actos del barrio, jornadas de puertas abiertas, charlas sobre arte, así como la preparación de exposiciones tanto colectivas como individuales.
Cada año, la asociación prepara una exposición colectiva con un tema concreto y una puesta en común, en la que participan la mayoría de las personas que forman parte de la asociación, haciendo lo posible para que resulte de una calidad atractiva para que la disfruten el mayor número de visitantes. En esta ocasión el tema elegido esBELLEZA-DESTRUCCIÓN-BELLEZA.
Para mostrar este trabajo, queremos acercar el taller al espacio expositivo, «De Urederra 18 a Mixtos en la Ciudadela». No solo que se conozcan las obras acabadas, sino también su proceso de creación, que se asome el público al proceso, que se vea el diálogo entre materiales, técnicas y conceptos que maneja cada autor-a en su intimidad. La documentación, el registro fotográfico, bocetos, argumentaciones…la poética del acto creativo. Si el público puede asomarse al proceso de construcción de la obra, se vuelve mucho más consciente del hecho excepcional que hay en ella, la suma de la sucesión de breves empeños, de pasos parciales, incluso de arrepentimientos, que han hecho posible el resultado final.